En su número 41, Economía: Teoría y Práctica publica cuatro artículos que abordan temas empíricos y dos artículos que desarrollan reflexiones teóricas.
El estudio de los diferenciales de crecimiento regional ha sido una preocupación constante de diversos economistas. En las investigaciones sobre México está presente el interés por comparar la dinámica de crecimiento económico entre los estados fronterizos y otras regiones del país. En el artículo “Diferencias en el crecimiento entre los estados de la frontera norte de México: una explicación”, de la autoría de Juan Manuel Ocegueda Hernández, Rogelio Varela Llamas y Ramón Castillo Ponce, profesores de la Facultad de Economía y Relaciones Internacionales de la Universidad Autónoma de Baja California, se asocian las brechas de crecimiento entre los estados fronterizos en las dos últimas décadas a los efectos de la migración sobre los cambios experimentados en la estructura demográfica y laboral. Destacan también el impacto diferenciado que ha tenido la inversión pública en la inversión privada y su repercusión en el mercado laboral formal e informal, en los niveles de productividad laboral y el PIB per cápita.
Conforme a las estimaciones de los autores, se advierte que no obstante que los estados de la región del norte han registrado un notorio crecimiento por encima de otras regiones del país, muestran una dinámica diferenciada en su desempeño. Tras ponderar las aportaciones de los estudios previos sobre el tema, Ocegueda, Varela y Castillo profundizan en el estudio de los factores que explican los diferentes ritmos de avance, lo cual permite hacerse de elementos útiles en el diseño de políticas que favorezcan la recuperación del crecimiento económico en los estados en que éste se haya desacelerado y sostenerlo en aquellos que han logrado resultados positivos en su desempeño.
Otro tema es el análisis de los factores que afectan el precio del petróleo, de gran relevancia no sólo para los países importadores sino también para los exportadores, por las probables repercusiones en el desempeño económico y en las finanzas públicas. Este aspecto es aun de mayor importancia cuando el gasto público depende de manera sustancial de los ingresos del crudo. Luis N. Lanteri, de la Universidad Nacional de Rosario, Argentina, se da a la tarea de analizar la incidencia de factores macroeconómicos (crecimiento mundial, política monetaria, tipo de cambio del dólar, etcétera.) en los precios reales del petróleo y, a su vez, el impacto de los cambios en estos precios sobre la actividad económica, el empleo y los precios domésticos en cuatro países con diferente estatus petrolífero: dos países importadores netos, un exportador y uno autosuficiente.
En su artículo “Determinantes de los precios reales del petróleo y su impacto sobre las principales variables macroeconómicas: EU, España, Noruega y Argentina”, Lanteri desarrolla su estudio mediante modelos vectoriales autorregresivos estructurales (SVAR, por sus siglas en inglés), con restricciones de corto plazo, tomando las últimas cuatro décadas. Sus resultados son muy sugerentes para la comprensión de las variaciones de precios de este insumo energético.
Por otra parte, en una dinámica económica marcada por la incertidumbre financiera, con variaciones en la política económica y volatilidad intermitente en los mercados financieros y, en consecuencia, con cambios súbitos en las decisiones que los agentes económicos toman en relación con el consumo, las transacciones de portafolio y la producción, ha cobrado vigencia el análisis de los patrones que provocan estos fenómenos, a fin de que se tomen decisiones oportunas. En tal contexto, se inserta el artículo titulado “Un modelo macroeconómico con agentes de vida finita y estocástica: cobertura de riesgo de mercado con derivados americanos”, de María Teresa V. Martínez-Palacios y Francisco Venegas-Martínez, de la Escuela Superior de Apan de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo y de la Escuela Superior de Economía del Instituto Politécnico Nacional, respectivamente. Ambos autores proponen un modelo de equilibrio general dinámico estocástico de una economía pequeña y abierta, en el que los individuos racionales se enfrentan a la decisión de cómo distribuir su riqueza entre consumo e inversión en un portafolio de activos cuando el horizonte temporal del que disponen es finito con fecha final estocástica, en un ambiente de política fiscal incierta y riesgo de mercado. El modelo valúa los precios de primas de opciones americanas mediante control óptimo estocástico en términos de racionalidad económica.
¿El sector financiero está vinculado con la parte real de la economía en México? Óscar Javier de la Garza y Raúl Ángel Martínez, ambos profesores de la Universidad Virtual del Tecnológico de Monterrey, se plantean como propósito de investigación dilucidar esta interrogante. Sustentados en una revisión de la literatura económica sobre la influencia determinante del sector financiero en el crecimiento económico, así como en la propuesta teórica de la desvinculación, o decoupling, que sugiere que los mercados financieros y su estructura organizativa no promueven el crecimiento de la economía real, los autores desarrollan un modelo empírico de cointegración que busca probar si se cumple o no la hipótesis de la desvinculación para el caso mexicano en el largo plazo. En su artículo, titulado “La desvinculación del sector financiero con la economía real en el caso mexicano: una prueba de cointegración”, De la Garza y Martínez reivindican que a diferencia de estudios previos sobre México, se incorpora la posibilidad de cambios estructurales, lo cual va incidir en resultados diferenciados. Esta investigación adquiere relevancia cuando se intenta explicar el efecto de las crisis financieras en la economía real, especialmente de la reciente de 2008-2009.
A su vez, Sergio Ordóñez, del Instituto de Investigaciones Económicas de la Universidad Nacional Autónoma de México, aborda el estudio del papel del Estado en un contexto en el que la globalización fragmenta el espacio nacional y el capitalismo es caracterizado como del conocimiento ante la presencia de una crisis económica neoliberal. Ordóñez recurre para su análisis del Estado a tres fuentes teóricas: al institucionalismo, en particular Douglass North, en relación con el régimen “abierto” de derechos de propiedad; al concepto de Estado ampliado, que se nutre de la teoría de Marx y de Gramsci, y al enfoque espacial-escalar, que integra las vertientes económica y espacial. En este contexto se advierte, por un lado, un desdibujamiento de la acción estatal en el ámbito económico del espacio nacional y, por el otro, un nuevo papel del Estado como coordinador para la cooperación y la colaboración entre los agentes que actúan en la economía regional y global.
Finalmente y en el horizonte trazado por Marx en El capital, Mario Robles Báez y Roberto Escorcia, profesores del Departamento de Producción Económica de la Universidad Autónoma Metropolitana-Xochimilco, se proponen reconstruir la determinación del valor social de las mercancías en términos de productos de capital. A propósito del debate entre economistas acerca de la relación entre valores y precios de producción expuesta por Marx a lo largo de su obra, los autores del artículo “La dialéctica de trabajo, valor y precio en la conceptualización del capital de Marx: una reconstrucción” argumentan que dicha reconstrucción hace posible la resolución simultánea de dos problemas de investigación de la teoría marxista: el de la transformación de valores en precios de producción y el de la reducción de los trabajos privados heterogéneos a trabajo social abstracto homogéneo.
Dra. Alenka Guzmán
Directora de la Revista